Nos unimos a la Eucaristía que se celebrará el próximo lunes en la parroquia del barrio de Los Rosales de El Palmar, en memoria de las víctimas de accidentes laborales 

07-09-10siniestralilaboralLa Delegación de Pastoral Obrera de la Diócesis de Cartagena ha hecho público un Comunicado con motivo de la celebración el próximo lunes, 28 de abril, del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo. Asimismo, ha  organizado para ese día, a las 8 de la tarde, en la Parroquia de Santa Rosa de Lima del Barrio de Los Rosales, en la pedanía murciana de El Palmar, una Eucaristía en memoria de las víctimas de los accidentes de trabajo y de las enfermedades profesionales. Desde la HOAC de Murcia te invitamos a que participes en esta celebración, en la que tendremos un recuerdo muy especial a nuestro compañero Pepe Tornel, consiliario de la HOAC y párroco de Santa Rosa de Lima, fallecido el pasado 21 de octubre.

LOS ACCIDENTES DE TRABAJO GENERAN SUFRIMIENTO
Desde la Pastoral Obrera queremos manifestar, una vez más, que el trabajo tiene que ser fuente de vida y de realización personal y humana, nunca un foco de enfermedad, de lesiones, de muerte o de sufrimiento.
Sin embargo, en nuestra Región de Murcia en el año 2013 se registraron 36.279 accidentes de trabajo, de los cuales 22 fueron mortales. Detrás de cada accidente hay una persona, una familia. Para nosotros, la vida es sagrada, como hijos de Dios. No hay nada, ni nadie, que esté por encima del respeto al ser humano y su existencia. No hablamos de estadísticas sino de personas concretas, cercanas a nosotros, que han padecido y sufrido las dramáticas secuelas de los accidentes, tanto el trabajador como su familia.

En los momentos actuales que vivimos, se vuelve más urgente y necesaria la toma de conciencia de los trabajadores y trabajadoras ( muy especialmente de los sectores de población más jóvenes), y de toda la ciudadanía en general, de la necesidad de tener unas condiciones de trabajo justas, dignas y seguras, reclamando a las empresas esas condiciones, pues se detecta el incremento de aquellas empresas que con el argumento de la crisis recortan inversiones en equipos de prevención y de planes de seguridad y de prevención de riesgos.

EL TRABAJO HA DE SER PARA LA VIDA
La realidad de los numerosos accidentes de trabajo nos desborda. ¿Somos conscientes del sufrimiento que padecen las personas y las familias afectadas?

Estas tragedias, con el sufrimiento personal y familiar que implican, han de ser mejor conocidas también por la comunidad eclesial y en concreto por la comunidad parroquial, como nos recuerdan los obispos españoles: “La situación de la salud laboral urge a los cristianos a comprometerse activamente por un trabajo sin víctimas, en defensa de la vida, colaborando según las posibilidades de cada uno a formar, en nuestra sociedad, la conciencia de la gravedad de la situación y sus causas, y seguir apoyando la promoción del mundo del trabajo en el conocimiento de los derechos y también de las obligaciones de los trabajadores respecto a la salud laboral, para exigir su respeto y comprometerse en observar la normativo laboral.”

siniestralidad_laboralLOS ACCIDENTES LABORALES, ¿SON EVITABLES?
Este es el objetivo principal de la numerosísima normativa legal que en los últimos años se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado, que se inició en el año 1995 con la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Pero, ¿cuál es la cruda realidad? Pues que cada año se producen numerosos accidentes de trabajo, como consecuencia de la FALTA DE MEDIDAS EFECTIVAS DE SEGURIDAD, DE PROTECCION PERSONAL Y PREVENCION DE RIESGOS, EN LOS PUESTOS DE TRABAJO.

Existen bastantes instituciones y entidades oficiales, así como organizaciones sociales, que tienen responsabilidades en materia de Prevención de Riesgos Laborales.

¿Dónde está la eficacia de los numerosos análisis, estudios, estadísticas, programas, proyectos…   en materia de Prevención y Siniestralidad Laboral?

¿Dónde está la eficacia de las miles de reuniones tripartitas (Administración, empresarios y sindicatos) celebradas con el nombre de Gabinetes de Estudio, Comités, Equipos o Comisiones de Seguimiento, Observatorios para la Prevención de Riesgos, Conferencias, Jornadas, Congresos…?

¿Cuál es el coste económico del mantenimiento y actividad de este conglomerado y entramado de técnicos y representantes, dedicados a la Prevención de Riesgos?

¿Cuál es la eficacia de los cursos de formación, que la legislación en materia de Prevención obliga a impartirle a los trabajadores?

Después de 19 años (1995-2014) todavía no ha arraigado suficientemente en el sector empresarial, ni en los propios trabajadores, la cultura de la Prevención.

TOMAR CONCIENCIA
Los trabajadores no solo padecemos la desesperación del desempleo, la precariedad, la marginación y la pobreza. También han roto y hemos roto nuestra conciencia, dignidad y solidaridad.

Ante los dramáticos problemas que nos acucian, y los males personales y familiares que padecemos, la solución no es solo y fundamentalmente económica, porque la codicia humana no tiene límites. Sólo la conciencia, la dignidad y la solidaridad, pueden traernos la esperanza de alcanzar soluciones.

¿QUE PODEMOS HACER?

DENUNCIAR las situaciones de explotación y de faltas de medida de seguridad en el trabajo.

APOYO SOLIDARIO: Afectivo, humano y material, a las personas y familias afectadas por una situación grave, económica y psicológica.

PARTICIPAR en los actos que se organicen, de carácter solidario, en defensa de unas mejores condiciones de trabajo en condiciones, digno y seguro.

EXIGIR a las empresas, a los representantes de los trabajadores y a los organismos públicos laborales que se organice el trabajo y la actividad productiva de los puestos de trabajo con plenas garantías de seguridad y salud, poniendo a disposición del trabajador todos los equipos y medios necesarios de protección personal.

CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA: Misa participativa, recordando desde el Evangelio a las personas, hombres y mujeres, fallecidas o inválidas por accidente laboral.

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Más información:

La celebración del Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo consiste en una campaña anual internacional para promover el trabajo seguro, saludable y decente que culmina el 28 de abril.

Desde el año 2003, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) observa el Día Mundial haciendo hincapié en la prevención de los accidentes y las enfermedades en el lugar de trabajo, apoyándose en las características tradicionales que fortalecen su acción: el tripartismo y el diálogo social.

El Día Mundial forma parte integral de la estrategia global de la OIT en materia de seguridad y salud en el trabajo, tal y como se establece en las Conclusiones de la Conferencia Internacional del Trabajo de junio de 2003. Uno de los pilares de dicha estrategia son las actividades de movilización; el Día Mundial es una herramienta importante para sensibilizar a la población sobre cómo hacer que el trabajo sea seguro y saludable y sobre la necesidad de darle un mayor peso político a la seguridad y la salud en el trabajo.

El 28 de abril es asimismo la fecha elegida por el movimiento sindical mundial para rendir homenaje a las víctimas de los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales.